Y revisando una de las tantas cajitas de mi madre, encontré unas perlas que me fascinaron. Las tanzas están medio gastadas, pero ni bien las vi me hicieron acordar a Audrey Hepburn en Breakfast at Tiffany's. Ese collar divino y elegante con un broche de diamantes es mi perdición desde la primera vez que vi la película.
Así fue como me apropié de esas perlas y me tomé el trabajo de enhebrarlas nuevamente con la idea de un nuevo accesorio para mi colección. Por supuesto que no va a quedar igual. Pero el hecho de tener una especie de gargantilla del estilo de la de Audrey, ya me vuelve loca.
Ella es la mujer más linda de todos los tiempos. Dueña de un estilo único, elegante y descontracturado. Una de las mejores actrices que tuvo Hollywood. Mi ídola. ¿Cómo no voy a querer un collar como el de ella?
Recuerdo cada uno de sus atuendos en la película y me dan ganas de imitarlos todos. La petite robe noir con las perlas, el pelo recogido y los guantes largos en color negro forman un equipo único y característico de la señorita Hepburn. Ni hablar de la capelina, el trench en color beige y los anteojos de sol. Todos los looks de este film merecen ser imitados.
Ya me veo un viernes con un vestidito negro acompañando el collar, porque en este caso las protagonistas son las perlas. Un conjunto que no puede fallar.
K.
No hay comentarios:
Publicar un comentario