El desfile comenzó con una manada feroz. Sí, manada feroz porque entraron todas las modelos juntas, con diferentes outfits, todos en animal print.
Pero eso no fue todo. Después llegó el resto con estampados arabescos en vestidos y trajes de blazer con pollera o pantalón. Lo mismo con un modelo de Op Art, simulando ilusiones ópticas. Otro estampado que tuvo presencia fue el de cadenas (muy Versace) en un mix con animal print.
La paleta del azul se vio en monos de terciopelo y looks clásicos. El rojo y el fucsia estuvieron presentes en vestidos, tapados y pantalones cigarette. Todo con apliques.
Todavía queda mucho más del BAAM. Hasta el 19 de marzo en el Hotel Sheraton.
K.
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